Resum
La investigación se efectuó considerando que las mujeres reclusas en su mayoría provienen de grupos sociales marginados, teniendo notables probabilidades de haberse involucrado en el trabajo sexual, consumo de sustancias, agresiones y embarazos no deseados a edades tempranas, lo cual puede llegar a ser un factor clave generador de enfermedades de trasmisión sexual (ETS). Objetivo: determinar la prevalencia de la infección por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) en un Centro de Rehabilitación Social de la Sierra Ecuatoriana, 2018. Metodología: se realizó un estudio analítico, diseño no experimental transversal, efectuado en 69 reclusas, en el cual se evaluaron factores sociodemográficos, contexto familiar, estilos de vida y conductas sexuales de riesgo para contraer VIH. Resultados: las reclusas indican haber iniciado su sexualidad entre los 16 a 30 años (31,88%) y de 31 a 49 (57,98%), además, señalan que viven en unión libre (37,68%), han cursado educación media (47,83%), sus costumbres son católicas (66.67%), su orientación es heterosexual (91,38%), tienen hábitos como consumo de tabaco (24,64%), alcohol (37,68%), drogas (14,49%), piercing (66,67%); además, sobresale el embarazo adolescente (73,91%), agresiones sexuales (10,14%), relaciones sexuales con consumo de sustancias (27,54%), no emplean preservativos (59,42%), presentan padecimientos por ETS (5,80%). Finalmente los datos indican que el 94,20% presentan resultados de VIH no reactivo y el 5,8% son VIH reactivas. Conclusiones: El estudio mostró una prevalencia baja de VIH en presencia de los factores analizados.