Resum

Introducción y objetivos: Desde su creación, la Cohorte Nacional de Niños con Infección por VIH (CoRISpe) ha aportado información relevante de los cambios en la epidemia del VIH pediátrico en España. En este trabajo describimos la situación de los niños y adolescentes con VIH que acuden a España desde Ucrania, por el conflicto bélico que asola ese país. Métodos: Se recogieron los nuevos casos de niños y adolescentes con VIH procedentes de Ucrania que llegaron a España desde el comienzo del conflicto bélico (febrero 2022) y se analizaron sus datos clínicos, virológicos e inmunológicos en su primera visita. Resultados: Se incluyeron 17 pacientes con VIH, el 82.4% por transmisión vertical, 35.3% mujeres, con mediana de edad de 10.9 años (RIQ: 10.1–12.5), todos con diagnóstico previo de VIH. Diez (58.8%) vinieron por ONGs, seis con familiares y uno por acogida. Dos presentaban infección tuberculosa latente (ITL) y uno coinfección por VHC. Dieciseis (94.2%) tenían más de 500 CD4/mm3 al llegar a España (mediana 870 [RIC 701-1020]) y todos recibían tratamiento antirretroviral (doce (70.6%) con pautas de análogos e inhibidores de la integrasa (9 con DTG, 3 con RAL), tres con análogos e inhibidores de la proteasa (2 con DRV/r y 1 con LPV/r) y dos con análogos y no análogos (1 con EFV y 1 con NVP)). De 14 pacientes con datos disponibles de carga viral, trece (92.9%) estaban indetectables (<50 copias/ml) y uno tenía 274 copias/ml, por cumplimiento irregular del tratamiento. Tras su primera visita en España, los dos pacientes con ITL comenzaron tratamiento, en 7 (41.2%) se cambió el tratamiento antirretroviral y en 5 (31.3%) se iniciaron o completaron sus pautas de vacunación, según las recomendaciones de las guías en España. Conclusiones: Los niños y adolescentes con VIH que han llegado a España por el conflicto bélico de Ucrania están en buena situación inmunológica y virológica. Sin embargo, algunos presentaban otras comorbilidades y han requerido actualizar su estado vacunal al calendario español. Los conflictos internacionales pueden provocar migraciones de pacientes con patologías complejas, que requieren una atención y seguimiento adecuado en sus países de acogida.