Resum
Objetivo: Evaluar la influencia del consumo de drogas recreativas sobre las conductas sexuales de riesgo y la adquisición del VIH y otras infecciones de transmisión sexual (ITS). Metodología: Estudio descriptivo de los pacientes diagnosticados por VIH entre 2014-2015 en una clínica de ITS de Madrid. Se utilizó un cuestionario estructurado sobre características sociodemográficas, conductuales y clínicas, y se realizó despistaje de otras ITS. Resultados: Se diagnosticaron 589 infecciones de VIH entre 2014-2015. El 94,2% eran hombres, el 3,7% mujeres y el 2% transexuales (TSX). La categoría de transmisión en el 93,2% fue en hombres que tienen sexo con hombres (HSH), el 5,9% heterosexual (HTX), 0,3% usuarios de drogas inyectadas (UDI) y el 0,5% por accidente biológico. Cumplimentaron el cuestionario 583 pacientes, de ellos, el 83,7% (n=488) refirió consumir drogas recreativas en el último año, incluido el consumo excesivo de alcohol. De ellos, 77,9% mantuvo prácticas sexuales desprotegidas bajo efecto de estas sustancias. El 50,7% de los consumidores y el 24,2% de los no consumidores tuvieron más de 10 parejas sexuales en el último año (p<0,005). Entre los 488 consumidores de drogas recreativas, el 95,7% eran hombres, el 1,8% mujeres y el 2,5% TSX. El 97,9% de los hombres eran HSH. Presentaron alguna ITS concomitante el 52,3% de los pacientes que consumían drogas recreativas frente al 35,8% de los no consumidores (p<0,005). Tabla1. Evaluación por drogas de consumo y su influencia sobre las prácticas sexuales no protegidas (PSNP), el número de parejas sexuales en el último año y la presencia de ITS concomitantes al diagnóstico del VIH.
Conclusiones: El consumo de drogas recreativas favoreció tener prácticas sexuales desprotegidas con múltiples parejas e incrementó el riesgo de adquirir ITS. Las drogas que más influyeron fueron: alcohol en exceso, mefedrona, GHB, poppers, cocaína y éxtasis/MDMA. Evaluar los hábitos tóxicos es fundamental para personalizar el consejo preventivo.